Ob. de san Diego anima al sacrilegio eucarístico


By Phil Lawler 

En la Diócesis de San Diego se anima a las jóvenes parejas no casadas que viven en concubinato y a las parejas que viven en una segunda unión civil a que vengan a la iglesia, consideren su estatus y, si encuentran su conciencia clara, comulguen. Después de convocar un Sínodo diocesano para abordar las cuestiones que surgen de matrimonios con problemas, el obispo Robert McElroy está invitando a parejas en relaciones irregulares a considerar si "Dios los está llamando a volver a la Eucaristía".

Como muchos comentaristas católicos han señalado, esa invitación podría tener un precio muy alto, para los que la emiten, y aún más que los que lo aceptan. Si los católicos reciben el Santísimo Sacramento mientras están en estado de pecado mortal, ponen en peligro sus propias almas. Y si los sacerdotes, que son los guardianes de la Eucaristía, alientan ese tipo de sacrilegio, son culpables de una ofensa mayor. Pero esos argumentos se han planteado con frecuencia, y aparentemente muchos clérigos los encuentran poco convincentes.